El término Guerras de religión se conoce como tal a partir de una serie de ocho conflictos que se desarrollaron en Francia durante la segunda mitad del Siglo XVI y en el que se enfrentaron católicos y protestantes calvinistas, conocidos como hugonotes y por extensión se aplica a los conflictos desencadenados en Europa en el siglo XVII, entre cuyas causas estén incluidos los motivos religiosos
La Guerra de los Treinta Años fue una guerra europea librada principalmente en la Europa central entre los años 1618 y 1648, inicialmente fue un conflicto religioso entre católicos y protestantes, pronto se convirtió en lucha entre las potencias europeas por conseguir una situación de equilibrio o como en el caso de Francia en una situación de hegemonía en Europa.
Sus orígenes se remontan a la hegemonía detentada por España en el s. XVI en Europa a través de sus monarcas Carlos I y Felipe II, estuvieron implicados en la misma una buena parte de las potencias europeas. Concluyó con la paz de Westfalia.
El resultado inmediato de la guerra, y que sin embargo iba a perdurar durante cerca de dos siglos, fue la consagración de una Alemania dividida entre muchos territorios.
La Guerra de los Treinta Años reestructuró la distribución de poder previa. La decadencia de España se hizo claramente visible. Francia fue la gran beneficiada de la Paz de Westfalia. Mientras España estuvo ocupada con Francia durante el periodo francés, Portugal declaró su independencia. Las Provincias Unidas también consiguieron la suya y se reestructuro el mapa europeo
La Paz de Westfalia supuso modificaciones en las bases del Derecho internacional, con cambios importantes encaminados a lograr un equilibrio europeo que impidiera a unos estados imponerse a otros
Consecuencias de la Paz de Westfalia fueron la aceptación del principio de soberanía territorial, el principio de no injerencia en asuntos internos y el trato de igualdad entre los Estados independientemente de su tamaño o fuerza.
El otro gran perjudicado fue el papado, que dejó definitivamente de ejercer un poder temporal significativo en la política europea.
La Paz de Westfalia supuso el fin de los conflictos militares aparecidos como consecuencia de la Reforma protestante y la Contrarreforma.
0 comentarios:
Publicar un comentario